Bienvenidos a la Luna llena de Sagitario, mes de milagros y grandes regalos para el trabajo y el proceso espiritual que venimos realizando a través de nuestra vida.
En Sagitario, el noveno signo, por su naturaleza de fuego en lo externo y de Aire en lo interno, tenemos la gran oportunidad de unir la acción, la pasión y el entusiasmo del fuego con el acceso al mundo de las grandes ideas espirituales del Aire y el poder comunicarlas a los demás, a fin de generar una verdadera transformación espiritual que cause impacto en el mundo.
De ahí que en Sagitario funcione un gran “almacén cósmico” en donde están guardados todos los secretos, ya sea en la forma de conocimiento espiritual, superior o trascendente que traen los Maestros al mundo, o en el gran acervo de conceptos filosóficos, religiosos, místicos, educativos y espirituales atesorados por la humanidad en las escrituras y libros sagrados a lo largo del tiempo.
Por ello, aparte del primer regalo que es la capacidad de poder “conectar” más fácilmente que en otros meses con toda esta sabiduría, tenemos en este mes de Sagitario, la oportunidad de apreciar y agradecer los milagros que se producen cotidianamente en nuestra vida.
Sagitario es un mes de milagros porque está regido por el planeta Júpiter, llamado en Astrología el “benéfico mayor”; porque expande, eleva y mejora nuestra conciencia, permitiéndonos ver la vida y lo que nos pasa en ella desde un punto de vista o perspectiva superior o espiritual.
Generalmente se considera un milagro como algo sobrenatural, raro, poco frecuente y que les sucede a ciertas personas que son agraciadas por la Luz del Creador con sanación, protección súbita o una solución salvadora que aparece para resolver un problema que aparentemente no tenía solución.
Por lo contrario, la sabiduría milenaria de la Kabbalah, considera como milagro a todo lo que el común de la gente vive y “da por hecho” como “normal y cotidiano”, como ser despertar por la mañana y tener un día más para poder dar y compartir lo mejor de nosotros mismos con los demás, el poder respirar, caminar; mirar la belleza de una flor, enternecernos ante los ojos de un niño, tener un trabajo, vivienda, pareja, familia, caminar por un lugar verde, disfrutar del Sol y el Aire puro etc.
Otro de los regalos que estos milagros cotidianos nos permiten es desarrollar dos virtudes espirituales que son la gratitud y la apreciación por estas grandes bendiciones que recibimos a diario, y que son independientes de cualquier problema o desafío que debamos afrontar, que si están en nuestra película de vida, son los que exactamente los que necesitamos para crecer .
Y el más grande “milagro” que podamos generar nosotros mismos, sin esperar recibir o que nos acontezcan cosas sobrenaturales desde fuera; es poder superar nuestra reactividad, impulsividad y la tendencia a culpar, juzgar o criticar a otros, por nuestro destino, “mala suerte” o nuestros problemas; cuyos únicos responsables somos nosotros, por ley de Causa y Efecto, seamos conscientes de ella o no.
También otro milagro es ver este tipo de cambios en quienes asumen la responsabilidad de transformarse a sí mismos a través del trabajo espiritual, y del Amor incondicional que consiste en aquel dar generoso y sin cálculos que caracteriza a Sagitario en su faz positiva
El símbolo más conocido y clásico de Sagitario es un centauro, mitad caballo y mitad hombre que dispara su flecha hacia las estrellas, uniendo la fuerza instintiva de la parte animal con la dirección que nos impone nuestra Alma, siempre ávida por saber y transformar toda obscuridad en Luz a través del trabajo espiritual.
El segundo símbolo, menos conocido, es “Keshet”, el arco iris o nombre de Sagitario en hebreo; siendo la fuerza de misericordia que actúa como contrapeso a la del juicio; y que apareció en el firmamento para indicar el final del diluvio universal como símbolo de esperanza y un nuevo comienzo para toda la humanidad.
Y de acuerdo al Zohar, o libro del esplendor, el arco iris aparece como señal para protegernos ante una situación de negatividad que está a punto de acontecer.
Como todo signo del zodiaco Sagitario tiene virtudes y defectos, veamos algunas de ellos:
-El poder sintetizar toda la variedad de conocimientos proporcionados por el signo de Géminis a modo de excesiva información, y quedarnos solamente con los más útiles, prácticas y aplicables a nuestras vidas.
-El poder trasmitir la sabiduría espiritual para el crecimiento, maduración y expansión espiritual de los demás; de ahí que Sagitario sea el signo de los Maestros espirituales por excelencia, y Géminis, su signo opuesto y complementario de los discípulos que aprenden.
-El gran entusiasmo para afrontar todo tipo de pruebas y retos que lo lleven al éxito, metiéndose presión a sí mismo y superando constantemente sus propios límites, correspondiéndole en el cuerpo las caderas y las piernas, que son las que nos permiten avanzar hacia los mayores logros en nuestra vida.
-El amor a la libertad y los viajes tanto físicos como mentales, en donde puedan conocer, explorar y experimentar nuevos horizontes.
-El asumir la responsabilidad por sus propios actos sin culpar a otros, el abandono de todo tipo de resentimiento, el poder escuchar y asumir críticas ajenas a su propio comportamiento y su gran capacidad de perdonar y aprender de los errores ajenos tomándolos para el acervo de su propia experiencia.
Entre los defectos más comunes del signo se encuentran:
-La expansión desmedida del conocimiento de manera teóríca; la pedantería, la soberbia intelectual e inflamiento del ego; la falta de atención a los detalles, las actitudes fanáticas con los ideales, dogmas y creencias religiosas, intentando imponerlas a los demás a toda costa y por la fuerza; teniendo aquí como ejemplos la inquisición, y todos los totalitarismos en toda su amplia gama.
-El apego al confort y la riqueza material, a la buena mesa, al comer excesivo, a los viajes y a gastar en cosas innecesarias o superfluas, buscando el placer a cualquier precio. Esto es característico de nuestro ego, que quiere gratificación instantánea, y completamente contrario a nuestra Alma, que gusta de la gratificación a largo plazo que resulta del dar y compartir.
– Ceder antes los excesos y la irresponsabilidad del signo, asumiendo aventuras y riesgos intrépidos de todo tipo producto del exceso de confianza y seguridad en sí mismo, y presionándose para competir y ganar todas las pruebas. En esto comparte con los dos otros signos de fuego el coraje, el valor para probarlos alcances de uno mismo de Aries, y la exposición sin límites de Leo en la búsqueda histriónica de aprobación, aplauso y reconocimiento.
-La marcada insatisfacción y culpa ante los fracasos, que reviven en su pantalla mental una y otra vez.
Sugerencias prácticas para el mes y Luna llena de Sagitario:
-Encaminarnos hacia nuevas metas en lo físico, emocional, mental y espiritual, viendo que podemos mejorar y expandir en nuestra propia vida.
-Desarrollar la certeza o convicción profunda, de que todo lo que le pasa es para bien, crecimiento y corrección de nuestra Alma; por eso buscamos el conocimiento espiritual que nos permita lograr esta gran seguridad de saber que en cualquier oscuridad y pase lo que le pase, siempre está la Luz del Creador detrás.
-Aprender que la felicidad se encuentra en uno mismo y que no hace falta ir tan lejos en busca de aventuras y de estímulos externos para lograrla.
-Aprender que finalmente nuestra misión aquí en la tierra, es ser canales de Luz y de la sabiduría espiritual que tanto necesita el mundo para encaminarse hacia lograr ser más humanos, generosos y dadores.